Las nubes están frondosas, no permiten ver con claridad a mis familiares, el clima ha de mejorar y tendré una mejor vista de todos mis afectos que aún viven físicamente.
Cuando partí al
sueño eterno lo hice con muchas incertidumbres, no quería emprender ese
maravilloso viaje que muchos han descrito, pero era inevitable, se abrieron
muchas puertas antes de ver la luz divina, el túnel no era como yo lo imaginaba,
y al final su luz no era tan resplandeciente. Encontré muchos rostros conocidos
unos me esperaban y otro avistaron a verme ya en el descanso de un viaje tan
largo, largo emocionalmente, en tiempo y espacio fue sumamente rápido, prácticamente
un abrir y cerrar de ojos.
Abril marco la
fecha de mi partida, no entendí por qué. En mi lecho hice muchos ejercicios,
memorice mucho mi pasado, hasta recordé episodios de mi vida que no pensé existían,
sencillamente habían desaparecido de mis recuerdos, escuche el llanto de
quienes me amaban, su dolor por mi partida fue muy doloroso, aunque se hizo llevadero
por que súbitamente se detuvieron en el tiempo a tratar de luchar ellos por sus
vidas, paradójicamente sobrevivieron, no sé cuáles eran realmente los planes del
creador, tengo que averiguarlo.
Aquí no hay
dolor, no hay sufrimiento, pero veo el de ustedes y me contengo, sus lágrimas
me hacen ver más allá de esas nubes y entiendo cuan duro ha sido mi partida, había
terminado mi ciclo.
La navidad desde aquí
es muy amplia, tengo visual no solo del arbolito que ha puesto mi hija Neyeska,
veo el de la casa nueva de Aurita y me gusta, en su decoración siento el amor
que me profesaron en vida, puedo hurgar en sus corazones y están descompuestos
por el dolor, cada uno de ustedes ha llorado y llora en silencio, pero yo los
sanare. Veo muchas luces multicolores desde acá arriba, las decoraciones tanto de
interiores como de exteriores es asombrosa en todos los rincones del mundo.
La nieve en
algunas regiones del planeta es también parte de lo que veo y siento, tengo una
perspectiva mucho más amplia, ahora entiendo más a otro de mis hijos que le
gusta la nieve, mi primogénito no le gusta el frio puedo verlo y sentirlo, pero
esta con los suyos y eso me tranquiliza y me hace feliz.
Aquí hoy nos preparamos
para celebrar la Navidad, quisiera contarle todo lo que hemos estado haciendo y
todo lo que hemos hablado su papa y yo, hoy nos reuniremos los Rodríguez y todos
los familiares de su papa que nunca conocí.
Sé que será muy
duro para ustedes el día de hoy, hubiese querido dejarlos a todos felices,
luche por eso toda mi vida, pero sé que el dolor hoy los embargará, sus
corazones los sentiré en mi alma latir más fuerte que nunca, pero restaurare
con mi amor sus recuerdos para que no sufran, cuando vean la silla vacía que yo
ocupaba, bañare de esperanzas su devenir, seguiré a la cabeza de nuestra
familia protegiéndola de todo aquel que quiera hacerle daño.
Aquí el tiempo es
efímero, no nos damos cuenta en realidad de cómo trascurre, lo vemos y lo
vivimos a través de ustedes, hoy sabemos que es navidad y por eso nos
disponemos a celebrarlo en un abrir y cerrar de ojo estaremos dispuestos para
cerrar este año, que se para ustedes que aun viven el sueño físicamente ha sido
de tristeza y dolor.
Les escribo para
que entiendan que hoy no los quiero triste a ninguno de ustedes, aunque sé que
la tecla está llena de mucha humedad, quiero verlos alegres, si, sé que es difícil,
ya que por primera vez ves estarán sin mí, no sé si alguna vez imaginaron tanto
dolor, pero yo prolongue mucho mi sufrimiento para que ustedes me disfrutaran,
hoy me hubiese gustado seguir con ustedes, pero mi dolor ya no era soportable.
La preparación de
la Navidad aquí en el cielo es indescriptible, es hermoso, hay un coro de ángeles
majestuoso, feliz porque me he reencontrado con muchos de nuestros seres
queridos y hoy nos disponemos a celebrar, con el más estricto sentido de
responsabilidad, ya que nunca los vamos a abandonar, estaremos con ustedes
secando sus lágrimas si alguno recuerda los momentos maravillosos que vivimos,
y así quiero me recuerden, con mi risa y con todo el amor que les di a cada uno
de ustedes, quiero que sepan que mi vida fue plena, los ame a ustedes a mis
hijos e hijas profundamente, pero lo más maravilloso fue poder ver crecer a mis
nietos y nietas, y conocer parte de mis bisnietos y bisnietas, no puedo
decirles que no lloren con mis recuerdos, pero sí puedo decirles que estaré a
su lado secando sus lágrimas y llenándolos de bellos recuerdos. Créanme yo
estoy bien estos a la diestra de dios padre.
El miedo se me extravió,
soy feliz y libre, no hay sufrimiento les repito, no hay dolores, solo mi alma
que los lleva muy adentro, los recuerdo cada día de mi vida aquí en el cielo,
he conocido gente nueva, familiares de sus afectos cercanos y puedo decirles
que también al igual que yo estarán presente con ellos hoy.
Feliz Navidad hijos
e hijas mías, los amare por siempre.
P.D: este año
ante tanto dolor las palabras no fluyeron para escribir mi habitual mensaje de
navidad, ya vendrán otras navidades si estoy con ustedes. Feliz Navidad para
todos, Aura dice que como madre pasando su Navidad en el cielo me pide que les transmita
a todos esos hijos e hijas que estas palabras también son para ellos como si
fueran de su propia madre.
Caracas 24 de
diciembre, 6 y 40pm.
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