Necesidad

Necesidad
Ricardo Abud

Muy a menudo escuchamos que hay que dar sin esperar nada a cambio. No lo creo, siempre esperamos que por lo menos nos respondan con un buen gesto, una sonrisa, sin embargo la vida no es justa, y nos podemos desvivir ayudando a una persona y al final si ya no te necesita, si se cansa de ti da la media vuelta y como si nada te quedas solo, debemos cuidarnos nosotros primeramente y velar por nuestras necesidades para luego estar en posibilidad de ayudar.

Wikipedia nos cuenta acerca de la necesidad y nos dice: "Las necesidades son la expresión de lo que un ser vivo requiere indispensablemente para su conservación y desarrollo. En psicología la necesidad es el sentimiento ligado a la vivencia de una carencia, lo que se asocia al esfuerzo orientado a suprimir esta falta, a satisfacer la tendencia, a la corrección de la situación de carencia"

Hoy coincido con Wikipedia (por fin) la necesidad está asociada a una carencia, en ocasiones no sabemos interpretar con claridad la trascendencia en cómo resolver esas carencias y erramos. El dinero se transforma en una herramienta, que cubre todas las carencias materiales que podemos tener, más no las más expeditas, como lo son las espirituales. Recientemente leía en un poster: "EL DINERO PUEDE COMPRAR SEXO, MÁS NO AMOR", pude entender para que sirven los prostíbulos, nos dan sexo, pero no amor. Confundir necesidad con placer es una prerrogativa que tenemos todos para interpretar nuestras confusiones. ¿Qué queda al salir de un prostíbulo, una necesidad cubierta a un placer satisfecho?

Ahora bien muchas veces nos sentimos desvalidos emocionalmente y recurrimos a un peregrinar interminable en la búsqueda de solventar nuestros problemas, cometemos muchos errores y sentimos que damos más de lo que recibimos, nos aferramos a las ilusiones de manera vehemente, cuando el amor florece para cicatrizar nuestras necesidades afectivas, hacemos lo imposible por destruir la esperanza, afloran sentimientos que nunca hemos experimentado, en el amar. Como entender que por fin cuando alguien nos escuchó,  de manera súbita le damos una bofetada y salimos corriendo sin pensarlo, para luego entender que fuimos egoístas y torpes. La vida se hace cuantitativamente insufrible, cualitativamente nos vemos en un letargo estrepitoso, donde la conciencia no nos permite descansar, aboga por un descanso. Salimos al ruedo y negamos lo que sentimos, bebemos, bailamos y simplemente mandamos al carajo todo sentir, reprimiendo esas necesidades que una vez nos acercaron a la esperanza. Excusas y solo excusas nos propinamos, hasta que nuevamente comenzamos a sentir necesidad de amor. El ratón moral nos oprime, más aun si terminamos en los brazos de alguien que solo supo aprovechar nuestras estupideces.

El cansancio llega y con él la reflexión necesaria entendiendo que damos para recibir, cuando trasmitimos todo lo aprendido, lo más maravilloso es recibir la grata satisfacción de a quien trasmites aprende, comienza un proceso de retroalimentación insaciable, donde   te cargas de muchas energías positivas, saciando esa sed de necesidades que te brindan un mejor vivir en todos los sentidos.

El universo gira y se mueve bajo la premisa de leyes, una de ellas, es: DAR LO QUE ESPERAS RECIBIR AUN ANTES DE RECIBIRLO, dando lo que plena tu corazón, lo que te pertenece, lo entregas sin retribución  te transformas en un recinto de luz. De nuestra capacidad de dar dependerá nuestra facilidad de recibir.

Se cubren esas necesidades de amor, de solidaridad intrínsecas en todo ser humano. No hay juegos, ni zancadillas. La mentira deja de ser una necesidad vana  y se convierte en una verdad absoluta.

La naturaleza humana es sumamente compleja (nosotros somos los creadores de esa complejidad) cuando en nuestra vida hemos acumulado el odio, el rencor, la tristeza, porque hemos pasado una vida difícil, esos sentimientos tienen que salir antes de que la nueva mercancía llamada amor aparezca, cambiando el panorama de nuestra vida. Cuando a nosotros nos parece que damos amor y recibimos odio, que damos dinero y recibimos miseria, ello se debe simplemente a un desfase entre la recepción de las energías y su utilización, es por ellos que todos esos sentimientos que nos impiden alcanzar la felicidad debemos execrarlos, si damos amor, es lo menos que podemos recibir, de lo contrario es mejor no reciclar el juego en la mentira. Es ahí cuando debemos limpiar nuestro corazón y darle mejor uso en la creación y  procesamiento de nuestra felicidad.

! QUEDA PROHIBIDO!

Queda prohibido llorar sin aprender,
levantarte un día sin saber qué hacer,
tener miedo a tus recuerdos.

Queda prohibido no sonreír a los problemas,
no luchar por lo que quieres,
abandonarlo todo por miedo,
no convertir en realidad tus sueños.

Queda prohibido no demostrar tu amor,
hacer que alguien pague tus deudas y el mal humor.

Queda prohibido dejar a tus amigos,
no intentar comprender lo que vivieron juntos,
llamarles solo cuando los necesitas.

Queda prohibido no ser tú ante la gente,
fingir ante las personas que no te importan,
hacerte el gracioso con tal de que te recuerden,
olvidar a toda la gente que te quiere.

Queda prohibido no hacer las cosas por ti mismo,
tener miedo a la vida y a sus compromisos,
no vivir cada día como si fuera un último suspiro.

Queda prohibido echar a alguien de menos sin
alegrarte, olvidar sus ojos, su risa,
todo porque sus caminos han dejado de abrazarse,
olvidar su pasado y pagarlo con su presente.

Queda prohibido no intentar comprender a las personas,
pensar que sus vidas valen más que la tuya,
no saber que cada uno tiene su camino y su dicha.

Queda prohibido no crear tu historia,
no tener un momento para la gente que te necesita,
no comprender que lo que la vida te da, también te lo quita.

Queda prohibido no buscar tu felicidad,
no vivir tu vida con una actitud positiva,
no pensar en que podemos ser mejores,
no sentir que sin ti este mundo no sería igual.

Atribuido a Pablo Neruda, aunque esto es cada vez más incierto...

Se le quiere que jode, y sobre todo de gratis,.

Nos vemos en el espejo, donde las mentiras nos atormentan,.